Nací en Santa Bárbara, California y viví en Morelia, Michoacán, México durante los primeros cinco años de mi vida. Salinas ha sido mi hogar desde que tenía diez años. Mis padres, a pesar de enfrentar dificultades, siempre enfatizaron la importancia de la educación como camino hacia un futuro mejor. Desde temprana edad, entendí que la alfabetización no se trataba solo de leer palabras en una página, sino de abrir puertas a nuevos mundos, fomentar el pensamiento crítico y empoderar a las personas para que defiendan sus derechos y la de sus comunidades. Como graduado universitario de primera generación, mi vida ha sido un testimonio del poder de la educación y del apoyo inquebrantable de la familia. A partir de estas raíces fundamentales, he construido una vida plena como profesora de inglés en una escuela secundaria, impulsada por mi pasión de inspirar a la próxima generación.